Desde que nací tuve la gran fortuna de dormir con mi hermana mayor, teníamos una habitación con un papel de colgadura de flores y dos camas gemelas en color blanco, que combinaban con una mesita de noche y un tocador en el mismo color.

Hoy me siento la mujer mas afortunada del mundo y agradezco a mis padres por haberme dado hermanos, ya que ellos, más que familia, son los mejores amigos para toda la vida.

En el cuarto siempre hubo historias que contar, juegos y discusiones sin fin, pero esta compañía de cada noche me hizo entender lo que es el amor incondicional y lo que es compartir todo lo tuyo:desde los juguetes, hasta la ropa. Generamos una conexión difícil de explicar.

En la actualidad encontramos casas y apartamentos con menos metros cuadrados y menos habitaciones, por lo que en ocasiones, una habitación compartida se convierte en una necesidad y una oportunidad para generar estos cuartos para los hermanos. ¿Qué pasaría si tuviéramos dos hijos y dos habitaciones? ¿Por qué no proponer una habitación compartida y una sala de juegos?

Habitaciones con camarotes o cama tarima son ideales para ahorrar espacio y para poder generar complicidad, adicionalmente ayudaremos a que los niños duerman mejor y se fomente la cooperación y los vínculos familiares.

Como adultos pensamos que los niños necesitan privacidad, por lo que debemos darle un cuarto a cada uno. Aunque los pequeños tienen personalidades diferentes, podemos hacer que cada micro espacio se personalice, debemos dar lugares a cada uno para tener sus cosas, un poco de privacidad y establecer reglas para evitar los conflictos.

Las consideraciones que debemos tener en mente para poder diseñar un cuarto compartido son: ¿Qué diferencia de edad hay entre mis hijos? ¿Tienen horas de dormir diferentes? ¿Tienen intereses en común?

Démosle a nuestros hijos la oportunidad de tener habitaciones compartidas, donde se puedan desarrollar cada día más y donde generen estos lazos de toda la vida, como los que yo tengo con mi hermana, lugares para desarrollar la creatividad y aprender a compartir. Atrévete a hacerlos, verás como se van a divertir.